jueves, 16 de febrero de 2012

Juan Rosell alias "El currante"


Juan Rosell es el flamante presidente de la CEOE y por sus últimas declaraciones se ve que es un digno sucesor del anterior presidente y experto en el hundimiento de empresas, Gerardo Díaz Ferrán.

A Rosell le ha encantado la reforma laboral que acaba de parir el Gobierno. Se nota que eso de abaratar el despido, recortar los convenios, flexibilizar (a gusto del patrono, claro) las condiciones laborales, etc. no afecta a su puesto de trabajo.

Pero aunque les ha encantado la reforma aún no están a gusto del todo. Porque como leí a alguien hace poco, la patronal es como la Iglesia, solo se conforman con todo. Ahora resulta que también quieren que se revise el derecho a la huelga.

Según Rosell, hay que modificar "lo más rápidamente posible" la regulación del derecho de huelga que recoge la Constitución. Se ve que eso de que los proletarios salgan a la calle a protestar (que lo dejan todo perdido, oig, que assssco) en vez de estar trabajando sin rechistar por un sueldo de mierda le parece mal. Pero no creáis que lo hace por avaricia, no, que va. Lo hace por defender los derechos de los trabajadores. Según él no es de recibo que "por defender los derechos de algunos se estropeen y se machaquen los derechos de otros". Supongo que en ese "otros" se incluirán él y sus coleguillas, es decir, el 1% de la población en edad de trabajar. Claro que ese 1% acumula el 99% del poder económico (que equivale hoy en día prácticamente también al poder político). Ahora quieren también acumular el 99% de los derechos.

Pues nada, esperaremos a la más que previsible reforma de la Ley de Huelga que según pretende Rosell la restrinja a periodos que no "supongan un daño irreparable para la economía o la seguridad de personas y empresas" y que me temo que según los empresarios serán del 1 de enero al 31 de diciembre.

Mientras tanto yo me iré apuntando a todas las manifestaciones y huelgas en defensa de NUESTROS derechos que se convoquen antes de que me lo prohiban.

O de que algunas de ellas las hagan obligatorias, como aquellas de la Plaza de Oriente...

Para ampliar información, la prensa.

1 comentario:

  1. El que ya NO apaga las subestaciones22 de febrero de 2012, 2:51

    ..."eso de que los proletarios salgan a la calle a protestar"...

    Una huelga no tiene nada que ver con manifestarse.

    De hecho, las mejores huelgas, las que tienen un éxito absoluto, son las que dejan al empresario o empresarios sin saber qué decir, porque ven que no hay repercusión social alguna (ni manifestaciones ni pancartas en los balcones ni piquetes ni policía ni nada de nada) mientras ellos van acumulando costes fijos sin ingreso alguno.

    La huelga sin aspecto de revolución, la huelga que da la impresión de estar hecha por "profesionales burgueses" es la que más temen. Porque les deja con el culo al aire, sin posibilidad de que los más tontos, los que aún andan con el miedo al "bolchevismo" (oído en Intereconomía), les echen una mano para manipular a "los mansos".

    La huelga es el arma perfecta. Es la forma de hacerles saber que su dinero, prestado o heredado, no vale una mierda si la gente no trabaja. Y que el trabajo de la gente sí que puede salir adelante sin un fuerte capital. Basta con examinar la Historia: La moneda, el "capital", la separación entre las cosas y su valor es posterior al nacimiento de las civilizaciones.

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